Aunque en el sistema económico imperante parecen conceptos contrapuestos, la felicidad es un parámetro que tiene que penetrar en la economía moderna. Durante la Mariápolis de Granada (1-6 agosto) se reflexionó sobre ello en uno de los talleres organizados por la Economía de Comunión.

Lleno total en el aula. Aquí se dialogaba sobre #gratuidad, #don, #felicidad. Conceptos que tienen mucho que ver con la #economía, aunque hoy parezca que a veces sólo importa el mercado, los beneficios o aprovecharse del trabajador.

El taller se desarrolló a lo largo de dos tardes a los que asistieron 40 personas cada día. ¿El objetivo? Dialogar sobre estos conceptos y sobre su necesidad de implantación en la economía actual.

Según explica Elena Bravo, empresaria de EdC y organizadora del taller, "hubo bastante participación por parte de los asistentes, lo que hizo que fuese un momento de comunión, que era lo que se pretendía".

También fue muy importante la presencia de empresarios de Economía de Comunión, que con sus experiencias, demostraron que "economía" y "felicidad" son dos conceptos que pueden y deben ir de la mano. Uno de ellos comentaba: "El taller de EdC de la Mariápolis ha sido un fruto bonito de comunión tanto en la preparación, como en el desarrollo del mismo. La verdad que ha sido una gozada ver el interés que había en el taller."

Otro destacaba el clima sereno en el que se desarrollaron las sesiones: "Muchos asistentes hablaron, señal de reciprocidad. Y el interés por la Economía de Comunión se vio en que muchos repitieron el segundo día".

"Al final, - explica Elena Bravo- se acabó presentando la Economía de Comunión, ya que muchos fueron al taller pensando que se explicaría y, por otro lado, las experiencias de los empresarios despertaban el interés por conocer más".

 El grado de satisfacción era evidente. Muchas personas dejaron su correo y expresaron sus deseos de seguir en contacto e informados.